La iglesia de Sant Pere de Sorpe es un edificio profundamente transformado y alterado por las importantes reformas que sufrió, especialmente entre los siglos XVII y XVIII, si juzgamos por su estilo, y la fecha que consta en su campanario de 1726; estas modificaciones suprimieron el ábside central y dieron la vuelta al sentido de la nave, colocando el presbiterio a poniente, transformando sus naves laterales en sacristías y capillas, mientras que el único ábside original que se conserva se destinaba a baptisterio y se sustituían los techos por bóvedas de arista.
En su conjunto, la iglesia de Sorpe es un edificio que se aviene con las formas evolucionadas de la arquitectura lombarda, posiblemente construido ya dentro del siglo XII, pero construida con importantes dudas y carencia de dominio del tipo arquitectónico que revelan la inseguridad de sus constructores, que seguían un modelo mal entendido y, por tanto, mal resuelto.
En el interior se conservan los siguientes elementos románicos: una pila de agua bendita, una pila de aceites con figuras esculpidas de leonas y una magnífica pila bautismal. Gran parte de los frescos murales están en el Museo Nacional de Arte de Cataluña y en el Museo Diocesano de La Seu d’Urgell. Se conserva también, íntegro, un retablo renacentista restaurado. Resultan interesantes los hallazgos aparecidos durante la restauración del año 2013: pinturas románicas y otros elementos para ofrecer una nueva visión de la iglesia.